Un frio penetrante y Las Mañanitas dieron inicio al Primer Encuentro Internacional de Mujeres que Luchan. Las primeras palabras escuchadas fue un especial saludo acompañado de condolencias para la familia de Eloísa Vega Castro, quien perdió la vida acompañando la caravana del CIG el pasado 14 de febrero.
El Caracol IV Morelia fue el lugar que dio recibimiento a miles de mujeres de México y del mundo; latinoamericanas, europeas y asiáticas se encuentran para gritar su digna rabia.
El CIG y su vocera Marichuy presentes en el encuentro. Porqué hoy, la lucha es por la vida.
Las bases de apoyo de los cinco caracoles presentes, acompañando las luchas de las ciudades, abrazando a hermanas que no conocían, pero consientes que el objetivo es común: aniquilar al capitalismo y al patriarcado.
Niños y niñas asistieron, acompañaron a sus madres. Ellos son fundamentales en esta lucha, porque de ellos depende que la consigna ¡Ya Basta! Deje de existir para gritar juntos ¡Sí se pudo!.
El día de hoy se prendió una luz, hay que llevarla a todos los rincones del mundo, y no permitir que esta luz de esperanza se apague. Porque hoy, la lucha será diferente. Hoy esta lucha no puede ser sin nosotras.
Se trata de un problema nacional. En la década de los 90´s Ciudad Juárez era el foco rojo de la violencia feminicida, poco a poco se fue expandiendo a otros lugares. Como epidemia, fue alcanzando a más entidades. El estado de México presenta cifras alarmantes.
Sentadas en silencio, con lágrimas en los ojos y el corazón desgarrado, todas las asistentes forman parte de un ritual maya en nombre de todas las mujeres del mundo que no están y que su sangre clama justicia.
Un vestido, las calcetas y los tenis se traducen en la transgresión de la masculinidad, rompiendo con estereotipos de género.
Este sistema nos quiere desaparecer, nuestra realidad es que nos excluye, por ser mujeres, por ser indígenas. Nosotras nos negamos a dejar de existir.
La cobertura y el registro del evento por parte de quienes integran los medios libres. En nuestra política no tenemos límites.
Ningún hombre tuvo acceso al encuentro; fueron asignados a las afueras del caracol. Ellos, por su parte, se encontraron en un espacio de reflexión y discusión, en un replanteamiento de roles establecidos.
REGENERACIÓN RADIO | MARZO DEL 2018 | ACORDAMOS VIVIR, Y COMO PARA NOSOTRAS VIVIR ES LUCHAR, PUES ACORDAMOS LUCHAR